domingo, 13 de mayo de 2012

Semana fallida


Vaya semana mala que he pasado. Empezé el lunes ilusionado tras mi debut en las competiciones con nota aceptable haciendo un rodaje recuperador bajo un aguacero que pa qué, y no le di la menor importancia. Pero me debí resfriar o algo, porqué desde ese día vengo arrastrando un catarro que no me deja parar. Seguí corriendo miercoles y jueves, dia fuerte uno y suave otro, con sensaciones inmejorables, pero con el maldito catarro yendo a más. No es un resfriado al uso, no tengo dolor de cabeza, ni sensación de trancazo, ni nariz taponada, ni espectoraciones, tampoco sibilancias de pecho, mucho menos febrícula. Solo tos, tos seca a todas las horas del día, una maldita tos de las que te explotan el pecho. Tos perruna también llamada. Me duelen los abdominales de tanto toser. Está empezando a ser incapacitante la maldita tos ésta. Así que ayer estuve al médico, y salí con una cajita de antibioticos bajo el brazo. Lo perfecto para iniciar una semana de duros entrenos.

También el viernes estuve en mi fisio, Ismael, para revisar ese tobillo maltrecho, la casi constante sobrecarga de gemelo y el dolor de cadera. Lo que más le preocupó fue lo de la cadera, me hizo un chapa y pintura completo metiendo mano a base de masajes, más que mano dedos prietos y codo. ¡Joder, qué daño me hizo! Vi las estrellas cómo nunca, empezó con ligamento rotuliano (dolor 6/10), siguiendo por tensor de la fascia lata (dolor 9/10), glúteo medio (6/10) y acabando en el músculo piramidal (10/10) para tratar de relajar estos musculos que crean una descompensación entre cadena interna y externa de la pierna, etc, o algo así. De correr ni hablamos en 3-4 dias me suelta. Vale.

Así que entre éstas cosas, que me tocó trabajar de noche toda la semana y el calor repentino llegado de la noche a la mañana han transformado la semana, haciendo cambiar mi estado de ánimo y viendo a esto del correr cómo algo lejano, cuando mis intenciones eran a principios de semana correr los 7 dias. Una semana arriba y otra abajo, siempre en la cuerda floja.

Para detener todo eso, voy a tratar de contrarrestar las acciones del enémigo saliendo a correr en cuanto cedan sólo un poco las presentes condiciones adversas. Queda poco para mi debut en la media maratón y no quiero excusas. Tendré que empezar el horario de verano, adaptado cómo estoy al de invierno, ésto es, correr al mediodía o en las horas centrales del día, siempre con sol en cualquier caso. No quiero repetir experiencias nefastas en tema de deshidratación, y estoy dando vueltas a cómo solucionarlo. No se si mochila tipo camelbak, o cinturón portabotellines, algo que no sea muy aparatoso ni muy caro. Pero la próxima tirada de más de 1h quiero llevar bebida encima, agua o flectomín.

El plan sigue en pie...

4 comentarios:

  1. Lo de la cadera me resulta familiar; mañana me hacen una resonancia magnética; en la primera exploración no han encontrado nada preocupante, la resonancia sólo es para descartar problemas más serios; estoy esperanzado; por cierto, agradezco un motón tus palabras, son muy reconfortantes; ánimo, mucha suerte y a seguir con ese plan; un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. El calor es un enemigo considerable,yo cuando salgo a correr.. el agua siempre viene conmigo al igual que mis zapatillas.
    Espero que esas molestias remitan y con la visita al fisio se haya ajustado un poco el carruaje, de cara a esa media.

    ResponderEliminar
  3. Hola compi, te devuelvo la visita y te sigo a partir de ahora. Un saludo

    ResponderEliminar
  4. Animo,esos contratiempos aparecen a veces... Pero lo primero es cuidarse uno mismo, una vez que uno se encuentra bien, se puede hacer ya otros plantemientos. Ya verás como pasa.
    Seguiré tu blog para ver que tal van tus progresos.
    saludos!

    ResponderEliminar